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Con el aumento de la densidad de la población y el desarrollo de las actividades productivas, la correcta gestión de los residuos representa un factor crucial para un crecimiento sostenible.
Los residuos de natura orgánica (tanto civiles como de la industria de la alimentación) presentes en los vertederos, producen lixiviados contaminantes y liberan malos olores procedentes de la degradación en condiciones anaeróbicas.
Con el fin de limitar el impacto ambiental relacionado con la gestión de estos residuos orgánicos, es posible acelerar el proceso natural de degradación utilizando bacterias que convierten los residuos en material estable no ulteriormente degradable (compost). Dado que este proceso consume agua, se resuelve al mismo tiempo el problema de la producción de lixiviados contaminantes.
Este tipo de instalación prevé la insuflación de aire entre los residuos en fermentación. El caudal del aire a suministrar se determina para asegurar la correcta cantidad de oxigeno y la temperatura adecuadas para la vida de las bacterias.
Air Clean pueden suministrar sistemas completos de insuflación que incluyen sistema de ventilación, difusión del aire y control de proceso.
Al entrar en contacto con los residuos, el aire cargado de substancias contaminantes debe ser tratado para eliminar las substancias contaminantes que contiene.